¿Deberían ser blogueros los investigadores?

Cada día veo más investigadores y científicos que tienen blogs muy interesantes o realizan valiosas aportaciones en twitter y otros medios.

Creo que estas tecnologías son una potente forma de difusión y comunicación de la investigación y que hace que este importante colectivo sea accesible por el llamado “gran público” y a la vez permite compartir el conocimiento de forma inmediata y fácil.

Podemos poner el ejemplo de los USA donde los investigadores parece que están más acostumbrados a difundir la investigación con todos los medios a su alcance y de esta manera llegar tanto al sector privado como la sociedad, que es uno de los objetivos que se han marcado a nivel europeo también.

Es obvio que comunicar o transmitir información por ejemplo a través de twitter es una forma inmediata y muy rápida de que ésta sea difundida; y el hecho de mantener un blog permite a los investigadores tanto difundir resultados de sus investigaciones, como opinar sobre cuestiones de publicaciones propias o de otros investigadores, sobre temas más normativos y legales, obtener información, etc...

Todo ello permite a diferentes colectivos conocer informaciones digamos “de primera mano”: por ejemplo, empresas privadas que se puedan interesar por resultados o por investigadores concretos; organismos oficiales que puedan obtener información plural y de personas de reconocida reputación que podría o deberían poder influir en las decisiones políticas; pueden complementar o incluso llegar a sustituir las reuniones académicas o de algunas asociaciones; y, en general, creo que en ciertas ocasiones son mejores las opiniones que se puedan dar en blogs u otros foros que tener solamente en cuenta por ejemplo un índice de impacto que no deja de ser un valor muy subjetivo ya que suele depender de un indicador decidido en un determinado momento, pero que, al cabo del tiempo puede perder su sentido, en mi opinión.

En resumen, desde mi punto de vista, encuentro que los blogs, twitters, etc… son unas increíbles herramientas de comunicación y espero que los investigadores cada vez las utilicen más. Y, todo ello unido a las iniciativas de acceso abierto a los repositorios de resultados de investigación, a mi modo de ver, abre unas posibilidades increíbles que pueden hacer cambiar muchos paradigmas o escenarios actuales de la investigación.